Desde 2016, han ganado seis carreras IRONMAN 70.3 St. George entre ellos, pero su último enfrentamiento el sábado vio a Lionel Sanders y Sam Long alcanzar nuevas alturas.
Los compañeros de entrenamiento en ocasiones dominaron desde la bicicleta en adelante en lo que fue la edición final de este icónico evento en Utah.
Pero fue Sanders quien demostró ser el más fuerte: dominó la etapa de bicicleta, arrebatando el récord de Long del año pasado en el proceso, y luego se mantuvo sólido para cerrar con fuerza en la carrera a pie.
Esto le dio a Sanders dos victorias en dos carreras esta temporada después de 70.3 Oceanside y este fue su quinto título en 70.3 St. George.
‘Me sentí absolutamente horrible’
Recapitulando su carrera, dijo al final: “Nadé bien. Para mí, nadé bien. Pude ver la gorra de Jackson Laundry durante toda la natación, lo que significa que estaba nadando realmente bien, muy por encima de mi capacidad, lo cual es lo único que puedes pedir.
“Y luego en la bicicleta, estaba cerca de la cabeza. Y cuando estoy cerca de la cabeza, quiero decir, estoy muy motivado para llegar allí”.
Eso es exactamente lo que sucedió cuando pasó por delante del súper ciclista Magnus Ditlev y no miró atrás.
Agregó: “Monté realmente duro, probablemente demasiado duro, y pagué por ello. Y me sentí absolutamente horrible en la carrera, cada paso. Tuve la suerte de que todos los demás también montaron duro”.
Juegos mentales
Long fue otro hombre en la carga y llegó al segundo puesto en T2, alrededor de dos minutos y medio detrás.
Sanders era plenamente consciente de ese hecho, como explicó: “Tuve que mirar mi reloj para ver los kilómetros porque sabía que si dejaba que él oliera la sangre, estaría acabado.
“Recordé los kilómetros que corrí en la primera vuelta y dije, solo dame kilómetros muy cercanos a esos de nuevo y es muy probable que él comience a decaer. Y luego, cuando sienta que no está ganando más tiempo, entonces se derrumbará”.
Long no se derrumbó, pero igualmente no se acercó mientras Sanders mantuvo la brecha constante y logró otra impresionante victoria, la cuarta, en el último 70.3 St. George.
Agregó: “Se siente fantástico. Amo este lugar. Estoy un poco triste, si soy honesto.
“Me encanta venir a esta carrera. Es un evento fijo en mi calendario. Me encanta venir aquí y definitivamente volveré a St. George, si no es para el 70.3, definitivamente para visitar. Espero que regrese algún día”.