¡La injusticia!
Eso fue lo que creó, con premeditación y alevosía, el expresidente Martín Vizcarra, quien, a través de un referéndum populista y con el respaldo de sectores comunistas y “caviares” de la época, reemplazó al Consejo Nacional de la Magistratura por la Junta Nacional de Justicia (JNJ). Esta fue conformada por personas cercanas a su entorno dentro del sistema judicial, incluyendo al IDL, con el objetivo de controlar todo el aparato judicial del Perú. Mediante algunas modificaciones legales en sus funciones, se habilitó la posibilidad de judicializar a sus rivales y competidores políticos. Así ocurrió, por ejemplo, con la destitución de la Fiscal de la Nación Patricia Benavides, y anteriormente con figuras como Pedro Chávarry, Víctor Raúl Rodríguez, Tomás Aladino Gálvez, Luis Sánchez, entre otros.
Actualmente
Patricia Benavides ha sido favorecida por la nueva JNJ, integrada en su mayoría por personas probas y honestas, quienes, luego de analizar lo sucedido y tras múltiples reclamos presentados por la señora Benavides ante diversas instancias, han ordenado su restitución. No se trata de un nuevo nombramiento, sino de una restitución justa y legal.
Es cierto
que la Junta de Fiscales Supremos es el único órgano facultado para elegir al o la Fiscal de la Nación; así fue elegida Patricia Benavides, al igual que Delia Espinoza en su momento. Sin embargo, Benavides fue destituida por la JNJ anterior de manera arbitraria, ilegal e inconstitucional, con una clara injerencia política y mediática, parcializada e ideologizada. Es decir, no tuvo un debido proceso. A pesar de ello, acató lo ordenado por ese órgano autónomo e independiente, dejando el cargo en su momento. Lo contrario ha hecho Delia Espinoza, quien se ha declarado en rebeldía y se aferra al cargo, alegando un supuesto golpe a la democracia, además de desconocer el mandato del Tribunal Constitucional de la restitución en sus funciones al Fiscal Tomas Gálvez, es decir no reconozco ni ley ni mandato constitucional, ni a la JNJ ni al TC.
Ahora
también el sector comunista y “caviar”, que controla los medios y que por años se adueñó del sistema judicial en el Perú incluido el Ministerio Público, no quiere aceptar la Resolución N° 231 de la nueva JNJ, que restituye a la señora Patricia Benavides como Fiscal de la Nación. En el fundamento N° 47, dicha resolución señala textualmente lo siguiente.
“Al adoptar esta medida
la JNJ restablece la juridicidad quebrantada, reivindica la confianza pública en su función disciplinaria y honra el principio de imparcialidad que la Constitución y la Ley del Procedimiento Administrativo General erigen en condición esencial de validez de todo acto administrativo.”
Hechos que
claramente, la anterior JNJ violó al destituir a la señora Benavides.
Por lo tanto
lo dispuesto por la actual JNJ constituye un acto positivo, ya que enmienda la inconstitucionalidad y escandalosamente sesgada actuación de la JNJ anterior. Aquellos que pretendan evadir esta nueva disposición están incurriendo en un acto inconstitucional que, en el corto plazo, deberá ser sancionado. No hay espacio a otras interpretaciones u opciones, la actual JNJ debe hacer valer el cumplimiento imperativo de su decisión, y todas las entidades del Estado y civiles, así como todos los ciudadanos, deben respaldarla por el bien del pais.
Es momento
de pensar en una justicia que cumple su rol constitucional y en la importancia de contar con una Fiscal de la Nación ajustada a derecho y eficiente, especialmente en el contexto actual de caos, inseguridad ciudadana y con un proceso electoral próximo, cargado de intereses internos y externos ajenos al bien de la patria.
¡Estamos advertidos!
(*) Teniente general FAP en retiro