Vambe, la startup que se define como un ecosistema de inteligencia artificial para escalar negocios y que levantó US$ 3,8 millones con el fondo brasileño Monashees, acaba de abrir oficinas en México. En Roma Norte con Chapultepec trabajarán 10 personas para seguir creciendo en el mercado mexicano, donde ya está el 30% de su facturación. Con eso, suman 50 personas en el negocio.
Fue un proceso lleno de anécdotas, cuenta su CEO Nicolás Camhi. “Llegué a México en marzo a firmar los papeles, y me di cuenta de que era todo presencial en notaría, y que el nombre Vambe y variantes nos lo rechazaron, así que la notaría me pasó un nombre que tenían pre validado, y para no atrasar las cosas, el nombre legal de Vambe en México es Redruni Sapi. Cuando el equipo vio facturas y cuentas de banco a este nombre, casi se infartan porque creían que eran puras estafas, olvidé de decirles el percance”.
Ya tienen 1.200 clientes en apenas 14 meses, dice Camhi, y “somos los con más experiencia en esto en Latam”. Tienen US$ 3 millones de ingresos anuales recurrentes, “lo que significa un x3 en seis meses”, asegura el ingeniero. En mayo se fue a vivir a México con cuatro ejecutivos de la startup. Para ayudar a otros emprendedores, Camhi escribió una guía práctica para abrir allá, con mitos, verdades y consejos para hacer mejor el proceso.