Un terremoto de magnitud 7,4, seguidos de numerosas réplicas, se registró este domingo frente a las costas de Kamchatka, en el extremo oriente ruso, lo que llevó a emitir una alerta de tsunami, que posteriormente fue levantada. Previamente, otro terremoto de 6.7 se registró a pocos kilómetros.
“La amenaza de tsunami en las localidades de Kamchatka ya pasó”, indicó el ministerio ruso de Situaciones de Emergencia en Kamchatka, en un comunicado en su cuenta de Telegram.
Previamente había afirmado que una posible ola de tsunami provocada por estos terremotos podría haber alcanzado las costas rusas, llegando a un máximo de 60 centímetros.
El ataque del ejército israelí contra la única iglesia católica de la Franja de Gaza causó el jueves la muerte de tres personas y varios heridos, entre ellos el párroco argentino Gabriel Romanelli.
En Telegram, el gobernador de Kamchatka, Vladimir Solodov, afirmó posteriormente que no se había observado ninguna “ola de tsunami” en localidades rusas.
El epicentro de estos sismos se encuentra en el océano Pacífico, a una distancia de entre 130 y 144 kilómetros de la ciudad rusa de Petropávlovsk-Kamchatski, capital de la región de Kamchatka, precisó el Instituto Geofísico de Estados Unidos (USGS).
Las olas causadas por el terremoto podrían haber alcanzado las Islas del Comandante, en la localidad de Nikólskoye, según el Ministerio.
Ante el riesgo de tsunami, las autoridades habían recomendado a los habitantes de las zonas afectadas que se alejaran de la costa hacia el interior y que buscaran refugio a una altitud de al menos 30 metros o, en ausencia de lugares a esa altura, a al menos a 2 km de la costa.
La península de Kamchatka es el punto de encuentro entre las placas tectónicas del Pacífico y Norteamérica, lo que convierte a la región en una de las zonas sísmicas más activas del planeta.
La península rusa, que separa el mar de Okhotsk y el océano Pacífico, es “una de las regiones más expuestas a los sismos en el mundo”, según el servicio estadounidense de geofísica.
Desde 1900, han ocurrido siete potentes terremotos con una magnitud igual o superior a 8,3 a lo largo de esta península.