En una noche tormentosa en Munich, donde el granizo y la lluvia intensa retrasaron el silbato de apertura, el fútbol regreso con furia y belleza. En el Allianz Arena, un estadio donde la historia resuena en cada rincón, Alemania y Portugal chocaron en una semifinal de la UEFA Nations League empapada de simbolismo, empapada de lluvia—y eventualmente, empapada de goles.
Alemania tenía al público local. Tenían momentum. Tenían juventud. Pero al final, no tenían a Cristiano Ronaldo.
Después de una primera mitad sin goles donde Alemania fue el equipo más agresivo, creando oportunidades a través de Leon Goretzka y Nick Voltemade, los anfitriones finalmente encontraron su quiebre justo tres minutos después del comienzo de la segunda mitad. Florian Wirtz no cometió ningún error después de que Joshua Kimmich pasara un balón perfecto por el corazón de la defensa de Portugal. El joven de 21 años se encontró solo frente a Diogo Costa y con calma cabeceó hacia casa para darle a Alemania una ventaja de 1-0.
Hubo un breve momento de tensión mientras el VAR revisaba la posición de Voltemade por fuera de juego, pero Slavko Vincic finalmente permitió que el gol contara.
Los cambios de Martinez dan vuelta el partido
El verdadero punto de inflexión no llegó en el campo, sino en la línea de banda. Con su equipo en desventaja y luchando por responder, el entrenador de Portugal, Roberto Martinez, hizo una triple sustitución. Entraron Francisco Conceicao, Nelson Semedo, y Vitinha—y de repente, todo cambió.
En el minuto 63, Conceicao anunció su llegada con estilo. Cortando desde la banda derecha, desató un disparo curvado con su pie izquierdo desde fuera del área que pasó por encima de Marc-Andre ter Stegen y se metió en la esquina lejana.
Cinco minutos después, fue el momento de Ronaldo. Fue Nuno Mendes, otro de los motores incansables de Portugal, quien preparó el gol ganador. Haciendo un rápido uno-dos con Bruno Fernandes, Mendes se liberó por la izquierda. Con Ter Stegen cargando, pasó el balón generosamente a un Ronaldo que esperaba.
No hubo error. Un simple toque—su 137º gol internacional en su 220ª aparición. El VAR revisó brevemente la jugada, chequeando por fuera de juego, pero las repeticiones mostraron que Ronaldo había cronometrado su carrera a la perfección.
Portugal rompe una maldición de 25 años contra Alemania
No fue solo una victoria cualquiera. Portugal no había vencido a Alemania en 25 años—no desde que Sergio Conceicao anotó un hat-trick en la Euro 2000. Ahora, 25 años después, fue su hijo, Francisco, quien anotó el gol del empate para ayudar a cambiar la historia.
Para Ronaldo, de 40 años, la victoria fue igualmente catártica. El legendario delantero había perdido los cinco partidos anteriores contra Alemania en torneos importantes. Esta noche, se fue como el ganador, el que marcó la diferencia, el ícono que todavía da forma al juego.
Con la victoria de 2-1, la Seleção das Quinas ha asegurado su lugar en la final de la Nations League. Les espera ya sea el campeón defensor España o los subcampeones del mundo Francia, que se enfrentarán en Stuttgart el jueves. Se promete un enfrentamiento entre generaciones, ya que Kylian Mbappé o Lamine Yamal buscarán desafiar al viejo maestro.