Harvey Elliott ha admitido que está considerando su futuro en Liverpool, insistiendo que no quiere “perder años” de su carrera quedándose en la orilla, incluso en un club que ama profundamente.
El centrocampista de 22 años fue una figura periférica la temporada pasada bajo Arne Slot, haciendo solo dos titularidades en la Premier League, ambas en partidos después de que Liverpool ya había ganado el título.
De sus 28 apariciones en todas las competiciones, solo seis fueron como titular, y jugó solo 822 minutos, a pesar de anotar cinco goles y dar tres asistencias.
Eso marcó una caída brusca desde la temporada anterior, cuando Elliott hizo 53 apariciones (27 como titular), contribuyendo con cuatro goles y 11 asistencias en una campaña de avance.
Ahora, antes del Campeonato Europeo Sub-21 de este verano en Eslovaquia, Elliott dice que es tiempo de reflexionar y posiblemente reevaluar.
“No quiero perder años en mi carrera porque es una carrera corta,” dijo Elliott a los reporteros.
“Necesito reflexionar. Necesito ver si estoy contento haciendo lo que hago y como puedo mejorar como jugador porque eso es lo más importante.”
Harvey Elliott admite que puede necesitar dejar Liverpool para evitar ‘perder años de su carrera’ 🔴 pic.twitter.com/mLY2DTdEQy
Aunque Elliott admitió que tiene mucho tiempo para el club: “Amo al club, amo a los hinchas, al equipo. También los apoyo” – dejó claro que no descarta un movimiento si significa más tiempo de juego regular.
“Si eso significa ir a otro lugar, entonces es una decisión que tengo que tomar. Nada me hace querer irme… pero se trata de lo que es mejor para mi carrera.”
Complicando las cosas está el interés reportado de Liverpool en la estrella de Bayer Leverkusen, Florian Wirtz, un jugador que probablemente ocuparía las mismas áreas creativas en el medio campo que Elliott. Ese posible fichaje podría empujar al internacional sub-21 de Inglaterra más abajo en la jerarquía.
Elliott también hizo referencia al impacto de una fractura en el pie sufrida en septiembre, que lo mantuvo fuera durante casi tres meses. Regresó en diciembre y esperaba que su dramático gol ganador contra el Paris Saint-Germain en la ida de los octavos de final de la Champions League pudiera ser un punto de inflexión.
“Pensé que el PSG fue una especie de alto para mí… pensé que era una oportunidad para comenzar y mostrar lo que puedo hacer,” dijo.
“Pero el jefe es el jefe. Él es la razón por la que ganamos la liga, no puedo quejarme.”
