La conversacion sobre el Balón de Oro de este año ha girado en gran parte en torno a dos nombres deslumbrantes. Con un doblete de La Liga y Copa del Rey y una campaña individual sensacional, Lamine Yamal parecía estar listo para convertirse en el ganador más joven de la historia. Mientras tanto, la forma explosiva de Ousmane Dembele ayudó al Paris Saint-Germain a conseguir un triplete doméstico y llegar a la final de la Copa del Mundo de Clubes. Sin embargo, el legendario entrenador Jose Mourinho ha votado en otra parte — y ha dejado claro por qué ninguno de los candidatos populares merece la corona.
En una reciente entrevista con Canal 11, Mourinho desestimó la narrativa común sobre los favoritos para el Balón de Oro 2025. Aunque lleno de elogios para el talento de Dembele y Yamal, el ex entrenador del Chelsea, Manchester United y Real Madrid ofreció una filosofía más centrada en el equipo para justificar su razonamiento.
“El fútbol, por mucho que todos queramos hacer de los jugadores personas especiales, de los entrenadores personas especiales, para mí, sigue siendo sobre el equipo,” dijo Mourinho. “Y para mí, cualquier trofeo individual siempre debe tener una conexión directa con los títulos.”
Con esa medida, descartó a Yamal, cuyo equipo de Barcelona — aunque impresionante a nivel nacional — no tuvo éxito en Europa, perdiendo ante el Inter en las semifinales de la UEFA Champions League. Pero en lugar de pivotar hacia el segundo candidato obvio, Mourinho hizo una elección más audaz.
La elección de Mourinho: Las credenciales de la Champions League importan
En lugar de respaldar a Dembele, que anotó 35 goles y proporcionó 16 asistencias en 53 partidos para el PSG la temporada pasada, Mourinho cree que el Balón de Oro debería ir a uno de dos jugadores menos celebrados, pero igualmente cruciales de ese mismo equipo del PSG — Vitinha o Nuno Mendes.
“Los amo a los dos; no puedo notar la diferencia,” dijo Mourinho. “Lo único que diría es que todavía hay un pequeño grupo de buenos mediocampistas allí, y ahora laterales como esos. Me gustaría que uno de ellos ganara, obvio, pero luego Jorge Mendes se enojará conmigo porque solo piensa que Yamal, su jugador, debería ganar.”
Vitinha, el mediocampista portugués de 25 años, fue fundamental en el control pesado del medio campo de los parisinos durante su campaña ganadora del triplete. Mendes, el dinámico lateral izquierdo, combinó solidez defensiva con destreza ofensiva a lo largo de la temporada. Ambos jugadores fueron cruciales en el triunfo del PSG en la Champions League, un torneo que Mourinho considera de la más alta importancia.
Un entrenador que se apega a principios
La perspectiva de Mourinho está arraigada en el ethos que ha llevado a lo largo de su ilustre carrera como entrenador: los títulos definen la grandeza. Esa visión inevitablemente moldea cómo evalúa los premios individuales. A pesar de la pura brillantez de jugadores como Dembele y Yamal, Mourinho no puede pasar por alto la importancia de la dominación europea.
“Cualquier premio individual siempre debería tener un enlace directo con los títulos,” reiteró. “El fútbol es, y siempre será, un juego de equipo.”