Alegría de Alianza Lima vs disciplina de Regatas
Translation: La alegría de Alianza Lima frente a la disciplina de Regatas

En la final de la Liga Peruana de Vóley 2024/2025 está en juego mucho más que el bicampeonato de Alianza Lima o el regreso al trono del Regatas Lima. Mucho más que la disputa de un título, hoy están en juego dos estilos totalmente distintos: por un lado, el joven DT Facundo Morando apeló a la diversión y soltura para liberar el verdadero potencial de sus dirigidas; y, por el otro, el experimentado estratega Horacio Bastit mantuvo la rigidez y disciplina que lo llevaron a ser tricampeón de la liga. Ambos argentinos, pero de generaciones y propuestas totalmente distintas, buscarán marcar la pauta en el vóleibol peruano.

El título nacional se decidirá en un duelo de infarto que se jugará este domingo 18 de mayo en Villa El Salvador.

¿Cómo juega el Alianza Lima de Facundo Morando?
“Nosotros nos tenemos que divertir. Lo más importante es que las chicas se diviertan, jueguen al vóley y tomen decisiones. Eso es lo que anhelamos desde que llegamos y, por ahora, está dando resultado”, declaró el estratega argentino de 36 años después de la primera final ante las regatinas, en la cual ganó con absoluta superioridad por 3 sets a 0 y parciales de 25-23, 25-20 y 25-18. Y es que las íntimas, que venían de ser campeonas en la temporada pasada y subcampeonas continentales en esta, atravesaban un bajón anímico y deportivo que solo fue superado a través de la juventud, frescura y motivación que les imprimió Facundo desde su llegada. Ahora, las blanquiazules juegan y gozan como cuando cerraban sus cuadras, ponían una net y se desestresaban antes de soñar con ser profesionales.

LEAR  El ciclo de cine prometido para el Año Nuevo Chino 2025 está a punto de estrenarse en la Cineteca Nacional.

Eso es lo que representa la nueva Alianza, la ‘del pueblo’: la perfecta mezcla entre la alegría del amateurismo y la calidad del profesionalismo. Y eso no sería posible sin la samba que le imprime la armadora brasileña, Marina Scherer; la fríeza de cada mate de la opuesta francesa, Maëva, o la cara-brava que le pone la bloqueadora Clarivett Yllescas. Las tres son la columna vertebral del equipo de ‘Facu’ y las dos últimas forman una de las mejores duplas que ha visto el vóley peruano en los últimos años. Ambas nacieron separadas por un océano Atlántico, pero unidas por un deporte y unos colores que les dan vida. Junto con la brasileña y las también peruanas Aixa Vigil y Chabelita Sánchez, que fue figura en la ida, prometen hacer al club bicampeón.

¿Cómo juega el Regatas de Horacio Bastit?
“Nosotros sufrimos varias lesiones de jugadoras, pero no las reemplazamos, porque no estamos de acuerdo con ese sistema (de sustituir lesionadas en cualquier momento) ni con las bases del torneo. Debería haber fechas preestablecidas para eso”, reclamó el estratega Horacio Bastit antes siquiera de la primera final, en una declaración que lo pinta de cuerpo entero. Su rigidez y pragmatismo lo llevaron a ser un campeón a donde fuera, y es uno de sus innegociables. Y razón no le falta, pues la disciplina del tricampeón regatino le permitió reconstruir un equipo en el que —practicamente— solo permaneció Kiara Montes. Ha sido —hasta el momento— tal la hazaña que, al inicio de la temporada, nadie pensaba que las jóvenes promesas del Regatas podían llegar a la final, y ahí están, aquí están, soñando con forzar el extra game contra la experimentada plantilla aliancista. Todo a punta de disciplina.

LEAR  "Cajamarca restaura sección del Qhapaq Ñan vinculada a Atahualpa" (Note: The translation maintains the original meaning while adapting it naturally to Spanish, specifying the connection to Atahualpa for clarity.)

Pero para trascender se necesitan títulos y, para conseguirlos, lo primero que deberá hacer el DT será repontenciar la recepción de Shany Ayme, que fue el objetivo de los saques blanquiazules en el partido de ida; apoyarse en su líbero Rachell Hidalgo, voceada para la próxima convocatoria de la Selección; en Paola Rivera, que le saca el jugo a cualquier bola; en la propia Kiara Montes, que cuando no ataca defiende como una fiera; y encomendarse a Emily Zinger, que con 421 puntos es la máxima anotadora de la LPV. El profe las necesita y ellas a él.

¡Tremenda finalísima!