BlackRock Inc., la mayor gestora de activos del mundo, planea seguir expandiéndose en Latinoamérica. La empresa asegura que las tres adquisiciones realizadas en los últimos doce meses ayudarán a impulsar su crecimiento en la region.
Los objetivos de crecimiento incluyen Chile, Perú, Colombia y Centroamérica, según Aitor Jauregui, director regional de BlackRock.
La empresa está “añadiendo capacidades y recursos para prestar servicios en la región de América desde México”, afirmó Jauregui en una entrevista. Agregó que se está contratando especialmente personal técnico y de ingeniería en Monterrey y Ciudad de México, y que también se incorporó un ejecutivo en Brasil a principios de este año.
La expansión de BlackRock contrasta con la de HSBC Holdings PLC, que ha estado reduciendo sus operaciones en la región. A principios de esta semana, Banco BTG Pactual SA anunció la compra de la unidad de HSBC en Uruguay, y el año pasado la empresa con sede en Londres vendió su negocio en Argentina al Grupo Financiero Galicia SA.
Otras salidas incluyen a Julius Baer Group Ltd., que vendió su unidad en Brasil a BTG Pactual en marzo, y Bank of Nova Scotia, que dijo en enero que transferiría sus operaciones en Colombia, Costa Rica y Panamá a Banco Davivienda SA de Colombia.
BlackRock, por el contrario, ve oportunidades.
“Los gobiernos no tienen suficiente capital para invertir en infraestructura o fomentar el crecimiento económico, y creemos que las asociaciones o colaboraciones entre el sector público y el privado impulsarán gran parte de las inversiones”, dijo Jauregui.
Eso incluye no solo ferrocarriles, puertos y aeropuertos, sino también infraestructura digital, en particular centros de datos e inversiones en inteligencia artificial.
Brasil y México
En octubre, BlackRock completó la adquisición de Global Infrastructure Partners. En marzo, esta firma anunció un acuerdo de US$1.000 millones para formar una empresa conjunta con Vale SA, comprando una participación del 70% en Alianca Geração de Energia SA, la filial de energía renovable de la minera brasileña. BlackRock administra US$38.000 millones invertidos en renta variable y deuda brasileñas, tanto privadas como públicas, y Jauregui afirmó que habrá más.
Su empresa, que gestiona US$12,5 billones (millones de millones), compró a principios de este mes la empresa de inversión en crédito privado HPS Investment Partners y, en marzo, adquirió Preqin, un proveedor de datos sobre mercados privados. Jauregui afirmó que estas operaciones impulsarán la expansión regional, especialmente ante el crecimiento esperado de la demanda de inversiones en crédito privado e infraestructura por parte de los fondos de pensiones latinoamericanos.
Las administradoras de fondos para el retiro en México, o Afores, son “grandes adoptantes de los mercados privados”, con hasta el 18% de sus carteras de US$380.000 millones invertidos en esos productos, según Jauregui, quien estimó que esa participación crecerá un 10% en los próximos años.
También prevé que esos activos se dupliquen en cinco años, alcanzando US$750.000 millones. Este crecimiento se debería al aumento en las tasas de contribución —del 6% al 15%— y a que más empleados accederán a estos fondos.
“El crédito privado también es muy común en el ecosistema brasileño, pero es más local”, dijo, y añadió que está viendo más demanda de formas de diversificar esa exposición a través de inversiones en el extranjero.
Las altas tasas de interés en Brasil aumentan el apetito de los inversionistas por los bonos de los gobiernos locales y las empresas, y los fondos de pensiones locales no suelen invertir más del 7% de sus carteras en el extranjero. BlackRock tiene alrededor de US$19.000 millones en activos bajo gestión de clientes brasileños.
400 empleados para la región
BlackRock tiene alrededor de 400 empleados dedicados a Latinoamérica, incluidos equipos en Miami y Nueva York. De ellos, 300 están basados en México. En noviembre tenía alrededor de 250 personas en México. Este año, la empresa incorporó a Fernando García, procedente de Morgan Stanley en Brasil, para atender al sector local de gestión de activos, un mercado que suma 9,9 billones de reales (US$1,8 billones).
“García ayuda a los gestores de activos a alinear nuestras soluciones con sus estrategias de inversión, actuando más como un consultor estratégico”, dijo Bruno Barino, director nacional de BlackRock para Brasil.
BlackRock también invierte en BDRs (certificados de depósito brasileños) de fondos cotizados en bolsa en el extranjero, con el fin de facilitar a los inversionistas locales la compra de acciones sin salir del mercado brasileño, explicó Barino. BlackRock tiene alrededor de 152 BDRs cotizados localmente en Brasil y planea añadir 29 más.
A pesar del aumento de aranceles de la administracion Trump, que afectan a las exportaciones de la región, todavía hay muchas oportunidades, según BlackRock.
“Chile y Perú producen algunos minerales que son fundamentales para la descarbonización”, dijo Jauregui, y añadió que México también sigue siendo atractivo. “Es muy difícil interrumpir las cadenas de suministro en un periodo de tiempo muy corto, por lo que seguimos pensando que hay vientos favorables para la economía mexicana”.
En Brasil, el sector agroindustrial es especialmente atractivo, dijo.
“Creemos que los mercados ofrecen ahora buenas oportunidades tácticas para invertir. Somos muy optimistas sobre la resiliencia de la economía de EEUU”, dijo Jauregui. “En particular, necesitamos inteligencia artificial, tecnología, todo lo que la economía de EEUU puede ofrecer al mundo”.