Durante la tarde de este lunes, el subsidio a la tasa de interés hipotecario se aprobó como ley, con un total de 129 votos a favor en la Cámara de Diputados. Este subsidio tiene como objetivo impulsar el sector inmobiliario y de la construcción, fomentar la inversión, el empleo y facilitar el acceso a la vivienda, en línea con el Plan de Emergencia Habitacional.
El subsidio a la tasa de interés hipotecaria alcanza un máximo de 60 puntos base. Se establece para el Crédito Hipotecario de Viviendas Nuevas, con un subsidio de hasta 60 puntos base sobre la tasa de interés asociada al crédito hipotecario. Se asignarán un total de 50.000 subsidios, con un valor inferior a las UF 4.000 ($ 156.636.600). Los beneficiarios deben cumplir con ciertos requisitos, como ser la primera venta de la vivienda y cumplir con las condiciones del Programa de Garantías Apoyo a la Vivienda Nueva.
De los 50.000 subsidios, 6.000 no podrán superar las UF 3.000 ($ 117.485.010) y estarán dirigidos exclusivamente a personas beneficiarias del DS01 y DS19. El programa estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2030 o hasta 15 años después de otorgar el último crédito. Además, no se aplicará a compraventas de promesas celebradas antes del 31 de diciembre de 2024 y los financiamientos solo podrán solicitarse hasta 24 meses después de la publicación de la ley.
Se introdujeron cambios en la ley que creó el Fondo de Garantías Especiales (Fogaes), renovando el Fondo en el área de Construcción hasta el 31 de diciembre de 2025. También se creó el “Programa de Apoyo a la Vivienda Nueva”, enfocado en las unidades nuevas que se entregarán junto con el subsidio. El Fondo no podrá garantizar más del 60% del valor de la vivienda y tampoco podrá garantizar créditos para compraventas de viviendas cuya promesa sea anterior al 31 de diciembre del año anterior.
Se estableció una habilitación legal para implementar un “Programa de Garantías para la Recuperación Productiva Regional”, inicialmente enfocado en la región del Biobío y con extensión a otras regiones como Arica y Parinacota, Valparaíso (especialmente Viña del Mar) tras los recientes incendios. Las instituciones financieras tendrán la responsabilidad de informar a sus clientes si las condiciones del mercado son más favorables que las ofrecidas al momento de la contratación del crédito.
Entre los meses de enero y abril de cada año, las instituciones financieras deberán informar al Ministerio de Hacienda sobre el monto total de los subsidios vigentes en el año anterior. El pago correspondiente será realizado por la Tesorería General de la República con cargo al Fisco, basándose en la orden de pago emitida por la Subsecretaría de Hacienda.