El meteórico repunte del cobre estadounidense ya lo acerca a US$ 6 por libra, a pocos días del plazo límite para la imposición de aranceles de la Casa Blanca.
El futuro de cobre Comex subió 3,6% a US$ 5,93 durante la mañana de este miércoles, sobrepasando los US$ 5,9 vistos por primera vez en la historia luego que Donald Trump revelara el 8 de julio que está considerando aplicar un arancel de 50% sobre el metal.
La nueva subida viene “impulsada principalmente por la proximidad del 1 de agosto, fecha en la que está previsto que entren en vigor los aranceles”, dijo a DF el analista sénior de mercado e industria en Plusmining, Juan Cristóbal Ciudad. “La cercanía de esta medida ha intensificado la presión compradora en el mercado estadounidense, en anticipación a un encarecimiento del metal importado”, explicó.
El ambiente es de incertudumbre, puesto que los anuncios dejaron varias preguntas abiertas. “Sigue habiendo dudas sobre los próximos aranceles sobre el cobre. Aún no hay detalles sobre si se aplicarán a todos los productos de cobre o si habrá alguna exención. Por ejemplo, la chatarra de aluminio está excluida de los últimos aranceles”, comentaron los analistas de commodities de ING, Warren Patterson y Ewa Manthey.
Con este nuevo avance se sigue ampliando la prima sobre el precio cotizado en la Bolsa de Metales de Londres (BML), actualmente en US$ 4,51 por libra, registrando este miércoles un alza de 0,2%.
“Si bien los precios en la BML también han mostrado alzas, lo han hecho de manera mucho más moderada, lo que sugiere que la escalada en EEUU está exacerbada por factores de demanda interna, especialmente por el interés en anticiparse al impacto de la nueva política arancelaria”, comentó Ciudad.
A esto sumó el hecho de que los mercados globales reaccionaron positivamente al reciente acuerdo comercial entre EEUU y Japón, que mejoró el apetito por riesgo y contribuyó al repunte de los precios en Londres hasta el punto de llevarlos a máximos desde el 4 de julio.
En medio del optimismo, los agentes estarían contemplando además un buen resultado de las negociaciones entre EEUU y China, cuya próxima ronda está programada para la próxima semana en Estocolmo.
