La Fuerza Aérea del Perú (FAP) se encuentra en la etapa final de la compra de aviones de guerra. El gobierno de Dina Boluarte tiene pendiente la firma y publicación de un decreto supremo para concluir con el proceso que busca adquirir 24 aviones de combate, con un presupuesto estimado de 3,500 millones de dólares.
El proceso —ya aprobado en el Congreso de la República a finales del año pasado— está en su fase final y solo resta la firma del decreto por parte de la presidenta para liberar a la FAP los fondos asignados en el presupuesto nacional de 2025 y 2026.
Sin embargo, el diario La República alertó que la FAP se estaría inclinando por elegir el Gripen E de la empresa sueca Saab, con sede en Brasil. Descartando así modelos con comprobada experiencia en combate como el F-16 Block 70 (EE.UU.) y el Dassault Rafale (Francia). Otra alerta que lanzó el diario es que la FAP busca pasar por encima de la Agencia de Compras de las Fuerzas Armadas (ACFFAA) bajo el argumento de que Saab de Suecia es el único en el mercado que cumple con los requerimientos del Estado peruano y sería considerado proveedor único. Sin embargo, fuentes de la institución militar aseguran que los otros aviones que se descartarían tienen mayores ventajas que el Gripen E.
¿Esta elección tiene que ver con las visitas ocultas de los fabricantes rusos al Ministerio de Defensa que alertó Perú21 en octubre del año pasado?
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EXPERIENCIA EN COMBATE
Según portales web especializados en armas y temas militares, el F-16 Block 70 de Estados Unidos es uno de los cazas más probados en combate del mundo, con más de 4,600 unidades producidas y operativas en más de 25 países. Ha participado en conflictos como Guerra del Golfo, Afganistán, Irán, entre otros. Su historial de combate probado y su interoperabilidad con aliados OTAN y regionales como Chile y Colombia lo convierten en una opción de bajo riesgo operativo.
El Dassault Rafale de Francia ha sido intensamente utilizado por Francia en Afganistán (2007–2014), Libia (2011) –donde realizó ataques de precisión y patrullas de superioridad aérea—, Mali (Operación Serval, 2013), Siria e Irak (Operación Chammal), ha operado desde portaaviones (versión Rafale M) y en condiciones desérticas, demostrando gran versatilidad.
El portal especializado Defence Street señala que, el Gripen E es una versión nueva y aún no probada en combate real. Su predecesor, el Gripen C/D, ha sido utilizado en misiones de patrullaje y entrenamiento, pero no ha participado en conflictos armados de alta intensidad. Suecia ha mantenido una política de neutralidad, y Brasil apenas está comenzando a operar sus primeras unidades.
Si Perú opta por el Saab Gripen E, se establecería una dependencia técnica y logística con Brasil, gobernado hoy por Inácio Lula da Silva, que ya produce y opera este modelo bajo licencia. Esto implicaría transferencia tecnológica parcial. Saab ha establecido una línea de ensamblaje y producción en Brasil (Embraer Defensa), lo que significa que muchas de las piezas, mantenimiento y soporte técnico provendrían de ese país. Esto puede ser positivo por cercanía geográfica, pero también implica que cualquier crisis política o económica en Brasil podría afectar la disponibilidad de repuestos o servicios.
En 2024, el Departamento de Justicia de Estados Unidos abrió una investigación sobre la venta de 36 aviones Gripen a Brasil, realizada en 2014 por un valor de aproximadamente 5,400 millones de dólares. La investigación se centra en posibles actos de corrupción durante el proceso de adjudicación dentro del entorno del presidente Lula da Silva.
“Estamos en las conversaciones finales con el ministerio de Economía y Finanzas en un proceso económico que se llama la concertación. El año pasado se aprobó el presupuesto y estamos viendo las fuentes de financiamiento para generar un decreto supremo que debe firmar la presidenta con lo cual se habilitan los fondos aprobados en la cuenta de la Fuerza Aérea”, dijo Carlos Chávez Cateriano, comandante general de la FAP, hace unos días, después de dar vuelta a la página al caso de la tragedia de la piloto Ashley Vargas.
DRONES: EL FUTURO
Mientras Perú considera cazas tripulados, el mundo se mueve hacia una nueva era, la de los sistemas aéreos no tripulados (UAS). Los drones armados han demostrado ser herramientas letales, versátiles y económicas en conflictos recientes como el de Ucrania, donde ataques con drones destruyeron más de 40 aeronaves rusas en bases aéreas estratégicas.
El conflicto en Ucrania ha sido un laboratorio de guerra moderna. A inicios de este mes, drones ucranianos destruyeron bombarderos estratégicos rusos Tu-95 en bases aéreas dentro del territorio ruso, utilizando drones ocultos en camiones modificados. Esta operación, según CNN, causó pérdidas por más de 7,000 millones de dólares a la aviación rusa, sin que Ucrania perdiera un solo piloto.
Las Fuerzas Terrestres de Ucrania muestra drones FPV equipados con dispositivos explosivos en un refugio en un lugar no revelado cerca de Kostyantynivka, región de Donetsk. (FOTO: AFP)
La última vez que Perú adquirió aviones caza fue durante los últimos años del Gobierno de Alberto Fujimori (1990-2000), cuando se compró una escuadrilla de aeronaves rusas MIG-29 y bombarderos SU-25, que se sumaron a los cazas franceses Mirage 2000 recibidos durante el primer Gobierno de Alan García (1985-1990).
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