El Papa que ama el ceviche, el arroz con pato y la cocina con alma.

En una Iglesia con siglos de historia, no es común que un papa hable con familiaridad de platos como el cabrito norteño, el arroz con pato o el ceviche limeño. Pero León XIV no es un pontífice común. Detrás de su investidura hay un paladar entrenado en el Perú profundo y una historia de vida marcada por la comida como lenguaje de fe, comunidad y pertenencia.

Robert Francis Prevost, ahora León XIV, llegó al Perú en 1985 como misionero agustino. Chiclayo fue su tierra adoptiva durante más de dos décadas, y allí no solo predicó desde el altar: también aprendió a escuchar desde la mesa.

También recordó que su hermano mostró desde joven una vocación religiosa clara: “Quería ser sacerdote desde pequeño. Eso era lo que quería hacer”.

“Le gustaba el cabrito, el arroz con pato y el ceviche. Disfrutaba de los sabores con humildad y alegría”, recuerda Edison Farfán, obispo de Chiclayo, quien compartió más de una comida con el nuevo pontífice. Personas que conocieron de cerca a Robert lo recuerdan ingresando a las cocinas de los comedores populares, donde no dudaba en servir platos para sus fieles en un acto de profunda humildad.

La chiclayana Cecilia Ríos, creadora del restaurante Pueblo Viejo, está conmovida hasta las lágrimas con la noticia de la elección del nuevo papa. Y no es para menos. Tuvo el privilegio de conocerlo y da fe de su bondad infinita.

Cecilia, la tía Ceci, cuenta en exclusiva a Perú21 que cuando recién llegó a Chiclayo el reverendo Robert era un caminante más, un ciudadano chiclayano. “Lo visitamos como parte de una asociación de damas de la caridad. Le contamos que queríamos hacer una posada para los más necesitados. No buscábamos apoyo económico. Quizás queríamos fuerzas y él nos las dio. Nos motivó, nos impulsó”, relata.

LEAR  17 años y 6 meses por intento de feminicidio; la fiscalía solicitó más de 40

Una historia que marcó la vida de Cecilia Ríos. “Nos dijo que éramos valientes. Dijo que si era una obra para Dios se iba a hacer realidad. Y así fue. Cuando este sueño se hizo realidad llegó a la posada”, detalla Cecilia. La Posada San Vicente, en la Urbanización San Luis de Chiclayo, cerca al mercado Modelo, sigue funcionando. Y allí todos saben quién es Robert Prevost, hoy papa León XIV.

Cecilia cuenta que junto a sus compañeras implementaron una cocina “preciosa” para alimentar a personas de la tercera edad y de cáncer. Le pregunto si le cocinó al papa. Eso no ocurrió. Pero sí le sirvió un lonchecito, algo sencillo. Porque así es Robert Francis, una persona que no es pretenciosa en sus gustos y que sabe acercarse a los más necesitados.

“Es un privilegio haberlo conocido, sentir su compañía, su paz. Es un hombre muy calmado y a la vez muy activo. Lo recuerdo también recorriendo las zonas afectadas por El Niño. Estaba con sus botas, abriéndose paso entre la gente, dispuesto a dar la mano, a dar fortaleza”. Cecilia confiesa que junto a su esposo lloraron de emoción al escuchar que ese gran amigo, ese hermano eterno, es el nuevo papa.

“Sé va a trabajar por la unidad y la igualdad. Lo sé”, afirma la chiclayana, convencida de que haber tenido la oportunidad de compartir con el ahora sumo pontífice es algo que no olvidará jamás.

Y la voz se le quiebra.

Amante confeso de la cocina casera, se ha dicho que una de sus mayores alegrías era compartir un cabrito a la norteña con frijoles después de una jornada en las parroquias. El arroz con pato —ese plato que sabe a fiesta— se convirtió en su favorito para las grandes celebraciones.

LEAR  El caso de Ana Gabriela Guevara, apenas "investigan"...

Y el ceviche, claro. Para Robert, era más que un plato: era un momento de comunión con su segunda patria.

Para León XIV, comer bien nunca fue un lujo, sino un acto de respeto por la creación. En varias entrevistas ha destacado la importancia de compartir la mesa, de honrar a quien cultiva, pesca o cocina, y de reconocer el rostro de Dios también en quien sirve un plato humeante. No era raro verlo en la cocina de los comedores populares sirviendo platos para sus fieles. Lo hacía con amor y con una naturalidad que impactaba a quienes lo veían. No podían no quererlo.

Aprovecha la NUEVA EXPERIENCIA, recibe por correo y por Whatsapp nuestro periódico digital enriquecido. Perú21 ePaper.

¡Ahora disponible en Yape! Búscanos en YAPE Promos.

VIDEO RECOMENDADO:

Deja un comentario