El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, fue diagnosticado este lunes con laberintitis, un trastorno del oído interno que provoca vértigo, segun informó el gobierno. Este nuevo episodio de salud ha obligado al mandatario, de 79 años, a cancelar parte de su agenda y guardar reposo.
El líder brasileño, quien ya había sido hospitalizado a finales de 2024 por una hemorragia intracraneal, se sometió a exámenes médicos en un hospital de Brasilia antes de regresar a la residencia presidencial, donde le recomendaron reposo absoluto.
Una fuente cercana a la presidencia, que pidió anonimato, confirmó a la AFP que Lula “suspendió algunas actividades programadas” debido a su malestar.
Un comunicado del Hospital Sirio-Libanés, difundido por el gobierno, detalló que el presidente presentaba “vértigo, diagnosticado como laberintitis” y que “debe permanecer en reposo el resto del día”. Los análisis de sangre y las pruebas de imagen arrojaron resultados “dentro de lo normal”, según los médicos.
PROBLEMAS DE SALUD RECURRENTES
Este último episodio se suma a una serie de complicaciones médicas que ha enfrentado el mandatario desde su regreso al poder en enero de 2023. En diciembre pasado fue intervenido quirúrgicamente en São Paulo para drenar un hematoma causado por una caída ocurrida en octubre. Previamente había superado un cáncer de laringe en 2011 y una operación de cadera en 2023.
Aunque en enero declaró estar recuperado y retomó una intensa agenda que incluyó viajes a China, Rusia, Vietnam y Japón, este nuevo problema de salud reabre dudas sobre su posible candidatura para las elecciones del próximo año, posibilidad que aún no ha descartado.
Curiosamente, su rival en los comicios de 2022, el expresidente Jair Bolsonaro, también enfrenta sus propios desafíos médicos. El ultraderechista de 70 años fue sometido en abril a una compleja cirugía abdominal derivada de la puñalada que sufrió durante la campaña de 2018. A pesar de estar inhabilitado políticamente y enfrentar un juicio por intento de golpe de Estado, insiste en participar en las elecciones de 2026.