Por: Pablo Carranza
– ¿Cómo analiza el juicio de Pedro Castillo?
Bueno, Pedro Castillo está haciendo con su equipo todo lo necesario para tener un caso a nivel internacional. En este momento está trabajando la opinión pública internacional de la izquierda, que de una u otra manera, contempla con mucha generosidad los actos golpistas que ejecutó Castillo, y está tratando de manejar esa opinión pública en su favor para presionar al Perú. Entonces, no es que esté actuando de una manera errática, sino que está ejecutando ya un libreto para presionar al Perú como Estado, y hacer que no se le condene por los delitos por los cuales está siendo procesado.
– ¿La Comisión Interamericana de Derechos Humanos tendrá algo que ver en todo esto?
Una vez que sea condenado, él puede apelar. Por cierto, no culmina la vía interna, pero una vez que culmine la vía interna, sí puede llevar su caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y efectuar una peticion, y esta, tal como está compuesta en este momento, no sería raro que abra una audiencia en la cual el Estado peruano tenga que ir a defenderse.
– ¿Los caviares siguen apoyando a Pedro Castillo?
No necesariamente, pero con tal de debilitar el gobierno de Dina Boluarte, y tratar de adelantar las elecciones, que es lo que más le conviene, sí podrían apoyar su causa ante la Comisión Interamericana, solamente para desestabilizar el gobierno de la exvicepresidenta de Pedro Castillo.
– ¿Castillo está haciendo una defensa política?
Sí, absolutamente, él ha renunciado a hacer una defensa jurídica, desde el inicio porque es la única posibilidad que tiene. Bueno, en verdad, es que no está actuando de manera equivocada. Lo aconsejable es llevar su caso a un terreno político para convertirse en una especie de perseguido, de víctima o de preso político.
– Pero ¿realmente Castillo es un perseguido político?
No, porque él ha cometido, aparentemente, y eso lo tendrá que decir en una sentencia el Poder Judicial, sino los tres delitos por los cuales está siendo procesado, por lo menos el de rebelión porque él ejecutó todos los actos necesarios para efectuar un golpe de Estado y bien pudo haber provocado la muerte de muchos peruanos. Si es que dos o tres generales le hubieran hecho caso, hubiera habido posiblemente un enfrentamiento entre efectivos del Ejército del Perú, entre ellos, o entre la Policía. Hubo efectivos policiales y oficiales, que le hicieron caso a las órdenes de Castillo, y en las primeras horas no dejaron entrar a la sede del Congreso a los parlamentarios. Por tanto, Perú estuvo a muy corta distancia de que haya una guerra civil. Por tanto, existió un golpe de Estado, y eso debe tener consecuencias jurídicas. No puede ser posible que, por los vaivenes de la política, quien ejecuta un golpe de Estado, termine gozando de la impunidad.
– ¿Usted qué opina del papel de Aníbal Torres?
Aníbal Torres es la persona, aparentemente intelectual, que pudo haber redactado el discurso, que necesariamente tuvo que haber sido consultado por Pedro Castillo, y por su equipo intimo para mejorar la redacción y situarlo políticamente en ese momento determinado. Es muy improbable que Pedro Castillo haya tomado esa decisión sin haberle consultado.