El secretario de Estado, Marco Rubio, ordenó a las embajadas estadounidenses en todo el mundo que suspendan las citas para visas de estudiantes, ya que la administración Trump considera implementar una verificación más rigurosa de los perfiles en redes sociales de los solicitantes.
La directiva, comunicada mediante un cable enviado a diplomáticos globales este martes, refleja el último intento del gobierno por limitar el ingreso de estudiantes extranjeros a instituciones estadounidenses, argumentando posibles riesgos a la seguridad nacional o la promoción del antisemitismo.
"Con efecto inmediato, y en preparación para una ampliación de los requisitos de revisión en redes sociales, las secciones consulares no deben incrementar la capacidad de citas para visas de estudiantes o de intercambio (F, M y J) hasta que se difundan nuevas instrucciones", escribió Rubio. Agregó que dichas pautas se publicarían en los próximos días. No obstante, las entrevistas ya agendadas podrán realizarse sin cambios.
Ni el Departamento de Estado ni el de Seguridad Nacional respondieron de inmediato a solicitudes de comentario.
Rubio había adelantado restricciones en marzo tras el arresto de Rumeysa Ozturk, estudiante de doctorado en la Universidad de Tufts, por agentes de civil frente a su residencia. Ozturk, coautora de un artículo de opinión en apoyo a Gaza, fue liberada bajo fianza mientras enfrenta un proceso de deportación.
"Si un solicitante de visa estudiantil admite que su objetivo en EE.UU. no es solo académico, sino participar en movimientos que vandalizan universidades, acosan alumnos o generan caos, denegaremos la visa", declaró Rubio.
Esta decisión ocurre días después de que el DHS intentara bloquear la matrícula de estudiantes internacionales en Harvard, medida frenada por un juez federal.
Además, el gobierno planea cancelar contratos federales con Harvard —por unos $100 millones— y Trump amenazó con recortar miles de millones en fondos públicos a la institución.
En Fox Business, Kevin O’Leary, profesor de Harvard, defendió un filtro para estudiantes extranjeros, destacando su talento y lealtad:
"Son excepcionales y no odian a EE.UU. ¿Por qué no evaluarlos, autorizarlos y retenerlos aquí tras graduarse? Así emprenderían, generarían empleo y cumplirían su propósito".