No es todos los días que el dueño de un equipo deportivo tiene la oportunidad de experimentar lo que su organización hace. Robert Kraft no estará alineándose en un partido de pretemporada de los New England Patriots en cualquier momento pronto.
Sin embargo, el automovilismo puede ofrecer tal oportunidad, de alguna manera, una que Gene Haas aprovechó con entusiasmo el viernes. Él, y su equipo de Fórmula 1, aparecieron en el festival anual Goodwood Festival of Speed, una extravaganza del automovilismo y motorsport, por primera vez, y para marcar la ocasión, Haas se puso al volante de un VF-23 para una carrera en la icónica subida.
La carrera fue idea del director del equipo, Ayao Komatsu, que condujo antes que Haas el jueves junto al piloto de Toyota, Kazuki Nakajima.
Gene Haas encontró que ir despacio era la parte más difícil. Bob McCaffrey/Getty Images
“Cuando Ayao me preguntó por primera vez sobre conducir aquí en Goodwood, me pareció que era un montón de trabajo solo por una excursión en una colina,” dijo Haas. “No sabía sobre el Festival de Speed antes, honestamente, pero me intrigó, y ahora entiendo por qué tantos aficionados vienen aquí.
“Es el evento para ver tantos coches diferentes – antiguos y nuevos, no solo coches de Fórmula 1 – así que realmente ofrece una oportunidad para que los aficionados vean coches que solo han visto en la televisión o en las películas. Me gustan los coches de los años 40 y 50 porque es asombroso que esos equipos hacían coches que alcanzaban 150 mph con las herramientas básicas que tenían comparado con ahora.”
La subida por la colina le dio a Haas una nueva perspectiva de lo que ha estado apoyando durante la última década. Pero mientras conducir un coche de F1 es un logro en sí mismo, Haas tuvo otro desafío que afrontar. Los coches de Gran Premio están diseñados para hacer una cosa: ir rápido. En Goodwood, esa es una cosa que él no estaba haciendo.
“Mi primera impresión de estar en el coche de Fórmula 1 fue que es muy apretado ahí dentro,” dijo. “Hay muchas sutilezas que tienes que aprender sobre el embrague, los cambios, y hay un millón de cosas pasando.
“Lo más difícil, sin embargo, es intentar conducir un coche muy rápido a una velocidad muy baja.”
Las celebraciones del décimo aniversario de Haas F1 continúan durante el resto del fin de semana, con los pilotos de carrera Esteban Ocon y Oliver Bearman programados para aparecer el sábado y el domingo.
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