El presidente francés, Emmanuel Macron, restó relevancia el lunes a un incidente donde su esposa, Brigitte, aparentó darle un golpe en el rostro al llegar a Vietnam para iniciar su gira por el sudeste asiático.
En un vídeo, se observó a Brigitte empujar levemente la cara de su marido antes de bajar del avión presidencial el domingo por la noche, haciendo que retrocediera brevemente antes de recomponerse y saludar a las cámaras en la pista.
Ella se mantuvo un instante dentro del avión, ocultando su lenguaje corporal. La pareja, casados desde 2007, bajó junta la escalineta, aunque Brigitte rechazó el brazo extendido de Macron.
“Estábamos discutiendo, o mejor dicho, bromeando”, declaró Macron a la prensa en Hanói. “No tiene importancia”.
Además, advirtió que no era la primera ves que vídeos suyos son malinterpretados por personas que tildó de “desquiciadas”.
Mencionó un clip viral donde se le ve retirando un objeto blanco arrugado de una mesa en tren durante su visita a Ucrania. Algunos insinuaron—sin pruebas—que era droga. Macron aclaró que era un pañuelo y su equipo acusó a enemigos de Francia de difamar.
Un portavoz del Elíseo comentó sobre el último vídeo: “Fue un momento de distensión entre ellos, riendo antes del viaje. Demuestra su complicidad”.
La visita de Macron a Vietnam, la primera de un mandatario francés en casi 10 años, busca reforzar la influencia de Francia en su excolonia.