En los últimos años, las industrias creativas digitales han ganado un papel protagónico en la economía de Perú y América Latina.
Cada vez más jóvenes encuentran en este sector una oportunidad concreta para insertarse en el mercado laboral, gracias al crecimientto sostenido de actividades como la animación digital, la producción de videojuegos, el diseño de contenido para redes sociales y la realización de series web.
Este ecosistema no solo se consolida como una fuente de empleo, sino también como un motor económico de gran relevancia.
Según el Banco Asiático de Desarrollo (2022), se proyecta que para 2030 estas industrias representen el 10% del Producto Bruto Interno (PBI) mundial, destacándose como espacios clave de innovación y crecimiento económico.
A nivel regional, el impacto económico de las industrias creativas digitales ya se hace notar.
Según la Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), este sector mueve alrededor de 2,200 millones de dólares al año. Esa cifra equivale al 3 % del PBI global. Además, la tendencia es creciente, lo que indica un futuro prometedor para esta industria.
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En el caso peruano, el desarrollo del sector de videojuegos ilustra con claridad este auge.
De acuerdo con el informe Global Entertainment & Media Outlook 2024 de la consultora PwC, se estima que este rubro generará ingresos de 181 millones de dólares en 2024, y superará los 200 millones en los próximos tres años.
“El talento joven se ha volcado al mundo digital no solo como consumidor, sino como productor.
Hoy es posible crear un canal de streaming, diseñar un videojuego o animar una serie desde cualquier parte del país y comercializarla a nivel global”, explicó Marianella Hernández, directora académica de Comunicaciones de Toulouse Lautrec. Resaltó que el acceso a tecnologías y plataformas digitales ha sido clave para el despegue del talento joven.
La pandemia también aceleró este proceso, al impulsar el teletrabajo y la educación a distancia.
Esto permitió a muchos jóvenes adquirir habilidades tecnológicas que hoy monetizan mediante herramientas de edición, motores de desarollo y redes sociales.