Estimado Director:
Respecto al tema de las licencias médicas, se han planteado propuestas enfocadas, principalmetne, en incrementar las sanciones, reformar la gestión de licencias y mejorar la supervision mediante cruces de datos más eficientes. No obstante, es crucial reconocer que el problema tambien evidencia deficiencias en los controles internos del Estado.
Siguiendo el modelo de las "Tres líneas de defensa", los funcionarios públicos y sus jefaturas actúan como primera barrera, las áreas de cumplimiento y asesoría como la segunda, y la auditoría como la tercera. Esto significa que el riesgo de fraude cuenta con tres capas de resguardo. Si las dos primeras hubieran operado correctamente, muchos de estos casos no habrían sucedido.
No es suficiente con sancionar; hay que prevenir, lo cual exige reforzar los controles internos y su monitoreo cotidiano, fomentar una cultura de integridad y que los altos mandos den el ejemplo—concepto conocido en el ámbito del control interno como "tone at the top".
El verdadero control no solo es reactivo; empieza con cada empleado que actúa con responsabilidad y sigue el ejemplo de sus superiores, incluso cuando nadie los observa.
Christian Ferrada
Académico del Departamento de Control de Gestión y Sistemas de Información, FEN U. Chile