El dinero que impulsa el imperio billonario de Elon Musk fluye cada vez más en una sola dirección: la inteligencia artificial.
El multimillonario anunció el domingo que planea convocar a una votación de los accionistas de Tesla Inc. para decidir si el fabricante de vehículos eléctricos debería invertir en xAI, la startup de inteligencia artificial que fundó hace dos años y que genera un gasto considerabel. Esto ocurre poco después de que SpaceX, su gigantesca compañía de lanzamiento de cohetes, acordara invertir cerca de US$ 2.000 millones en la firma de IA, según personas familiarizadas con el asunto.
Musk afirmó que no apoyaba una fusión de las compañías, pero que quería que los inversionistas de Tesla se expusieran al crecimiento de xAI, valorada en US$ 113.000 millones tras su incorporación a su plataforma de redes sociales, X, en una operación íntegramente en acciones en marzo.
Lo que el multimillonario no explicó fue cómo todas estas inversiones adicionales de su imperio empresarial ayudarían a contener los mil millones de dólares mensuales que xAI recibe mientras intenta desarrollar modelos avanzados de IA y competir con competidores como OpenAI de Sam Altman.
La empresa de IA de Musk aún no se ha consolidado entre las grandes corporaciones ni como un referente para los desarrolladores como sus rivales OpenAI y Anthropic.
xAI de Musk prevé gastar unos US$ 13.000 millones en 2025, según ha informado Bloomberg News, lo que significa que sus prolíficas iniciativas de recaudación de fondos apenas alcanzan el ritmo de los gastos.
Entra Elon Inc., la constelación de empresas, superpuestas y en constante expansión, que podría ayudar a ampliar el margen de maniobra disponible para el negocio de la IA, que devora grandes cantidades de efectivo.
El problema es que no todos los inversiontas de Tesla quieren aprovechar la valoración de US$ 1 billón del fabricante de vehículos eléctricos para que sirva de alcancía a Musk. Y el chatbot de xAI, conocido como Grok, conlleva sus propios riesgos. El viernes, la cuenta de Grok en X emitió una extensa disculpa por “el horrible comportamiento que muchos experimentaron” después de que se autodenominara “MechaHitler” con publicaciones que elogiaban a Adolf Hitler y parecían calificar el Holocausto de “efectivo”.
El impacto de Tesla
Si bien Tesla sigue siendo el fabricante de automóviles más valioso del mundo, la caída de las ventas y las críticas a la labor de Musk de recortar el presupuesto federal durante la administración Trump han hecho caer las acciones alrededor de un 22% este año.
Una inversión en xAI “diluirá aún más el declive del negocio de vehículos eléctricos”, afirmó Nancy Tengler, directora ejecutiva y directora de inversiones de Laffer Tengler Investments.
Aun así, Tengler afirma que es probable que dicha inversión sea aprobada por los accionistas de Tesla, muchos de los cuales siguen siendo extremadamente leales a Musk. Tengler afirma que el acuerdo de 2016 para comprar Solar City, íntegramente en acciones, sirve de precedente, y que fue aprobado por los accionistas a pesar de algunas objeciones, incluyendo demandas.
“Los accionistas lo verán como algo positivo”, afirmó Tengler. “Creo que xAI seguirá aumentando su valoración y una inversión en la compañía permitirá a los accionistas de Tesla participar”.
Tesla ha fijado el 6 de noviembre como fecha para su próxima junta anual, pero aún no ha publicado su representación. Tesla; Musk; Robyn Denholm, presidenta de la junta directiva de Tesla, y Travis Axelrod, jefe de relaciones con inversores de Tesla, no respondieron a las solicitudes de comentarios.
Las empresas de Musk tienen una larga trayectoria de colaboración. Tesla vende sus baterías Megapack a escala industrial a xAI, que está ampliando su centro de datos “Colossus” en Memphis. Desde enero de 2024 hasta febrero de este año, xAI invirtió unos US$ 230 millones en Megapacks, según un informe de Tesla.
Musk y otros ejecutivos han debatido la posibilidad de desarrollar una infraestructura de IA integrada verticalmente, según una fuente cercana al asunto. Para ello, xAI necesitaría distribución global y conectividad rápida a gran escala, lo que podría contar con el apoyo de Starlink, la constelación de más de 7.000 satélites en órbita baja operada por SpaceX, la empresa de Musk, según esta fuente.
Agregaron que Starlink podría servir como columna vertebral de la distribución de los modelos de lenguaje de xAI, lo que convertiría la inversión en xAI en una apuesta por un futuro megacliente. The Wall Street Journal informó anteriormente que SpaceX acordó invertir en xAI.
Integración de Grok
Tesla también está integrando Grok en sus vehículos eléctricos.
“Ahora puedes hablar con Grok, tu compañero de IA desarrollado por xAI, sin usar las manos en tu vehículo Tesla”, según el sitio web de Tesla. “Puedes elegir la voz y la personalidad de Grok, desde Narrador hasta Desquiciado, para mayor comodidad mientras viajas”.
El año pasado, Musk declaró que quería tener el 25% del control de voto de Tesla antes de expandir sus iniciativas de inteligencia artificial y robótica, y que, sin ese control, “preferiría desarrollar productos fuera de Tesla”. Desde entonces, Tesla ha seguido trabajando en Optimus, su robot humanoide.
“Si Elon puede demostrar que xAI podría impulsar la IA de Tesla en el futuro, tiene sentido que Tesla invierta”, afirmó Seth Goldstein, analista sénior de renta variable de Morningstar. Sin embargo, Elon ha afirmado anteriormente que xAI y la IA de Tesla son completamente diferentes.
Si es probable que esto siga siendo así, invertir en xAI solo tiene sentido desde la perspectiva del capital privado si la junta directiva concluye que es probable que el valor de xAI aumente. De lo contrario, la junta debería rechazar la oportunidad.