La irrupción de DeepSeek, el modelo grande de lenguaje (LLM, en inglés) chino en enero de 2025, marcó un punto de inflexión ante el liderazgo indiscutido de Estados Unidos en inteligencia artificial (IA), al construir su sistema con pocos recursos. Si bien el primero tiene miles de datos y talento disponible, el segundo tiene de su lado a las grandes tecnológicas con datos de todos los países y a un Presidente dispuesto a aportrarlas.
Pero la carrera no se agota aquí. Comienzan a surgir nuevos jugadores: Francia anunció inversiones millonarias, y Emiratos Árabes Unidos está dispuesto a abrir su billete para apoyar a ese país en su afán por el liderazgo europeo; Arabia Saudita lanzó su propia empresa pública para desarrollar IA; e India, pese a contar con menos recursos estables que China o EEUU, tiene talento de sobra para avanzar en esta disputa que también es geopolítica.
Ante este nuevo escenario, la cofundadora de Ready 2 Digital y directora de empresas, Sandra Guazzotti, dijo que la competencia global se juega en “un terreno distinto”, porque “ya no se trata solo de infraestructura física”, sino de quién controla los algoritmos, los datos y la capacidad de “moldear decisiones y narrativas” en tiempo real.
“La solución no es usar más datos y más capacidad de cálculo, sino pensar cómo hacer las cosas mejor, como lo hizo DeepSeek”. Ricardo Baeza-Yates, Instituto de ia experiencial de la Universidad Northeastern
“Estados Unidos, China, India y la Unión Europea ya han definido sus apuestas, cada uno con modelos y estrategias propias -desde ecosistemas cerrados hasta modelos abiertos- y están construyendo los cimientos de una nueva era digital, donde la IA es la tecnología habilitante por excelencia”, afirmó.
Un jugador emergente es Francia, que, en febrero pasado en la Cumbre para la Acción Climática para la IA, realizada en París, anunció inversiones por 109 mil millones de euros para los próximos años, para proyectos, soluciones e infraestructura, apalancadas por actores privados. Por ejemplo, Emiratos Árabes Unidos anunció hasta 50 mil millones de euros para levantar en ese país el mayor campus de centros de datos de IA de Europa.
Varios actores interpretaron la jugada francesa como una respuesta al anuncio del Presidente de EEUU, Donald Trump, del proyecto Stargate, una empresa conjunta con grandes tecnológicas como Microsoft, Nvidia, Oracle, OpenAI y la británica Arm, con una inversión privada de US$ 500 mil millones a cuatro años, de los cuales, ya se desplegaron US$ 100 mil millones con sus primeros inversionistas: SoftBank, Oracle, OpenAI y el fondo emiratí MGX.
“Estados Unidos, China, India y la Unión Europea ya han definido sus apuestas. (…) Están construyendo los cimientos de una nueva era digital”. Sandra Guazzotti, ready 2 digital y directora de empresas
El adjunto del embajador para Asuntos Digitales del Ministerio para Europa y de Asuntos Exteriores de Francia, Arthur Barichard, señaló a DF que “la IA no es solo una revolución tecnológica o económica, es un cambio de paradigma que impactará todos los sectores y redefinirá cómo accedemos al conocimiento y la cultura”.
Dijo que el desafío para liderar la carrera no solo será quién innove más rápido, sino quién logre gobernar esta transición de forma equilibrada. “No habría nada peor que uno, dos o tres modelos acaparando el mercado y que cada escuela, empresa o gobierno del mundo tuviera que depender de ellos”.
El despertar
Hasta ahora, los países europeos han estado rezagados en el desarrollo de la IA, salvo algunas empresas de Alemania y el Reino Unido, ninguna se ha posicionado al nivel de Google u OpenAI.
No habría nada peor que uno, dos o tres modelos acaparando el mercado y que cada escuela, empresa o gobierno del mundo tuviera que depender de ellos. Arthur Barichard, Ministerio para Europa y de Asuntos Exteriores de Francia
Pero la salida al mercado de DeepSeek, con costos muy inferiores a los LLM de las estadounidenses, pareciera haber abierto los ojos al resto del mundo. La Comisión Europea lanzó en febrero InvestAI, una iniciativa público-privada para movilizar 200 mil millones de euros para impulsar la IA, incluidos 20 mil millones de euros para un fondo para gigafactorías de inteligencia artificial.
Un mes después de DeepSeek, el Gobierno chino anunció un fondo nacional de inversión en IA con capital inicial de US$ 8.200 millones y, en marzo, sumó un fondo estatal de capital de riesgo para tecnologías estratégicas -que incluye IA- con el que espera movilizar US$ 138 mil millones en 20 años.
También en Asia, emergió un nuevo jugador: Arabia Saudita creó en mayo de este año Humain, una empresa pública de IA respaldada por su Fondo de Inversión Pública (PIF), para ofrecer infraestructura, servicios en la nube y modelos de IA avanzados. Y grandes tecnológicas de EEUU, como Nvidia, AMD, Cisco y Amazon anunciaron proyectos asociados con este país árabe por más de US$ 10 mil millones.
Factores diferenciadores
Para el director de investigación del Instituto de IA Experiencial de la Universidad Northeastern en el campus de Silicon Valley (EEUU), Ricardo Baeza-Yates, la clave no está en quién invierte más, sino en quién innova mejor. “la solución no es usar más datos y más capacidad de cálculo, sino pensar cómo hacer las cosas mejor, como lo hizo DeepSeek”, expresó.
Afirmó que el modelo que predomine -código abierto o cerrado- “afecta la hegemonía de cualquier país”, pero que el principal factor diferenciador será el talento: “En esto tienen ventaja los países más poblados y aquellos que tienen buena educación y que han atraído talento, como EEUU, Europa, Canadá o Australia”.
Señaló que por cantidad de talento y por volumen, China debería liderar la carrera. “La otra posibilidad sería India, pero la cantidad de recursos que tienen es distinta en los sistemas políticos, son mucho más estables en China”, dijo.
Según Barichard, a pesar de que el desarrollo de la industria de la IA requiere de inversiones costosas en infraestructura, energía, chips y centros de datos, los modelos más eficientes -como DeepSeek- harán que las grandes inversiones “no sean sostenibles a la larga”, y que más bien hay que avanzar en “ampliar el acceso a datos, talento e infraestructura”.
Agregó que los actores de hoy, como China y EEUU, no tienen necesariamente garantizado el liderazgo futuro y afirmó que será una carrera balanceada, donde surgirán nuevos países como “tercera vía”, entre ellos, India, Corea del Sur, Japón, Canadá y regiones, “esperemos, América Latina. Esos son países que comparten la misma visión: ser un actor propio de esta revolución y no un mero cliente”.
Jugadores del sur
De acuerdo con la segunda versión del Índice Latinoamericano de Inteligencia Artificial (ILIA) 2024, del Centro Nacional de Inteligencia Artificial (Cenia), Chile, Brasil y Uruguay lideran la carrera en la región.
En 2024 Chile, en el marco de una visita del Presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció una alianza con ese país en materia de IA y la creación del Centro Binacional Franco-Chileno en Inteligencia Artificial, con inversiones de ambos países por definir.
Además, el Cenia, con apoyo del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, está desarrollando LatamGPT, el primer modelo de lenguaje grande latinoamericano, el que tiene a Brasil como socio clave, alianzas con otros países para de datos y una inversión público privada de US$ 3 millones a la fecha.
Baeza-Yates dijo que el país tiene una “enorme oportunidad” para liderar la carrera en Latinoamérica, “para hacer las cosas distintas”, para lo que se requiere avanzar en un marco regulatorio para la tecnología amplio, más allá de la IA, que considere aspectos como el respeto a la dignidad humana, la productividad, la protección del medio ambiente y la cultura.
Guazzotti destacó el liderazgo de Chile por la infraestructura digital, la Política Nacional de IA que promueve la colaboración público privada y las ventajas de IA en sectores como astronomía y minería, pero dijo que persisten brechas como una “baja inversión en I+D+i (investigación, desarrollo e innovación), déficit de talento especializado, desconexión entre academia e industria y un enfoque todavía limitado en innovación”.
En tanto, Brasil en 2024 lanzó el Plan Brasileño de Inteligencia Artificial, el que busca posicionar al país como líder global en IA, con cinco ejes: infraestructura y desarrollo; difusión, formación y capacitación; mejoramiento de servicios públicos; innovación empresarial; y apoyo al proceso de regulación y gobernanza de la IA.
El plan considera una inversión pública de 23.030 millones de reales (US$ 4 mil millones) a 2028.