Despues de casi tres años de tramitación, el proyecto del Gobierno que establece un mecanismo para aumentar la participación de mujeres en los directorios de las sociedades anónimas abiertas y sociedades anónimas especiales verá la luz. Ello, pese a que gran parte de la oposición o se opuso o se abstuvo, bajo el argumento de que las cuotas de género menosprecian la capacidad de las mujeres realizar las ocupaciones en que se implementan este tipo de medidas.
Aun así, el proyecto fue aprobado por 57 votos a favor y 40 en contra, con lo que la Sala de la Cámara Baja despachó a ley la iniciativa.
La propuesta del Gobierno establece una cuota máxima de 60% para el sexo con mayor representación dentro del directorio, con lo que se aspira a una “mayor diversidad en estos espacios y a un equilibrio en la integración de hombres y mujeres”.
El proyecto aprobado, consagra el mecanismo de “cuota sugerida”, que deberá ser revisado permanentemente por la Comisión para el Mercado Financiero y según el cual se implementará en los primeros tres años la cuota sugerida de un 80%, desde el cuarto año la sugerencia será de 70% y a partir del séptimo año deberá alcanzar un 60% de manera permanente.
Comité asesor
Si no se cumplen los indicadores de la CMF, las empresas incumplidoras pasarán a un régimen transitorio de cuota requerida por cuatro años. Si cumplen, podrán volver al régimen de cuota sugerida.
Por otro lado, el proyecto crea también un Comité Asesor, que tendrá carácter transitorio y con integración público-privada, para reforzar el acompañamiento al sector privado en su implementación. Este organismo tendrá como objetivo a los ministerios de Economía, Hacienda y de la Mujer en la aplicación de la ley y coordinar esfuerzos entre los sectores público y privado para fomentar una representación equitativa de hombres y mujeres en los directorios de sociedades anónimas abiertas y especiales fiscalizadas por la CMF.
Adicionalmente, este comité contará con representantes de gremios empresariales y de organizaciones que promuevan la igualdad de género y la profesionalización de los directorios.
Esta instancia tendrá un rol clave en la implementación efectiva de la ley, asegurando una transición gradual y equitativa. Evaluará las brechas por sector y el funcionamiento de los registros de directores y directoras en Chile; coordinará la recopilación de datos y reportes sobre la integración de directorios; y, propondrá medidas complementarias, como incentivos y estrategias de capacitación. Además, “fomentará redes y programas de desarrollo para fortalecer la equidad de género y garantizará la transparecia del proceso mediante reportes anuales al Congreso”.