Política
La Sociedad Nacional de Agricultura presentó 75 propuestas que apuntan a un Estado ágil y eficiente, mercados, infraestructura para el desarrollo, agricultura más productiva y sustentable, y seguridá para el mundo rural.
Antonio Walker, presidente de la SNA, junto a la candidata Matthei.
Un total de 75 propuestas programáticas para el desarrollo del agro le presentó este martes la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) a la candidata presidencial de Chile Vamos, Evelyn Matthei.
En el marco de la reunión, la exalcaldesa de Providencia valoró el contenido del documento, al que calificó como “serio, bien pensado y extraordinariamente interesante”, reconociendo que el sector agrícola es uno de los pilares fundamentales de la economía nacional, con exportaciones que superan los US$ 30 mil millones anuales y que generan cerca de un millón de empleos.
“Estamos frente a un rubro estratégico para el presente y futuro del país. Chile se transformará en una verdadera potencia eco alimentaria mundial, y eso solo será posible si trabajamos con visión, equidad y sostenibilidad”, señaló.
Entre las propuestas, Matthei dijo que hay cinco ejes urgentes en los que se requiere una acción inmediata y decidida: un Estado ágil y eficiente, mercados para Chile, infraestructura para el desarrollo, agricultura más productiva y sustentable, y seguridad para el mundo rural.
“Los pequeños agricultores asumen todos los riesgos, desde los climáticos hasta los comerciales, mientras los intermediarios capturan gran parte del valor. Eso debe cambiar”, recalcó.
Matthei también hizo hincapié en la excelencia sanitaria de la producción chilena, un activo que, según indicó, debe resguardarse como ventaja competitiva ante los mercados internacionales.
“Chile tiene condiciones únicas, y debemos cuidarlas. Nuestro potencial agrícola no solo es económico, sino también estratégico y medioambiental”, concluyó.
Esta reunión marca un paso relevante en la consolidación de un programa agrícola que reconoce la urgecia del presente, pero que también proyecta el futuro del campo chileno como un actor clave del desarrollo sostenible del país.