Las microcredenciales o certificaciones de habilidades han ganado relevancia en los últimos años como una opción para que los trabajadores se adapten al actual entorno laboral, caracterizado por la influencia de la tecnología y la necesidad de nuevas habilidades.
En el Panel Laboral UNAB, 30 head hunters abordaron el impacto de estas certificaciones en las trayectorias laborales, destacando la acreditación de habilidades específicas como la principal ventaja, seguida de la mejora en la empleabilidad y el compromiso con el aprendizaje continuo.
Entre las ventajas adicionales de las microcredenciales se encuentran la flexibilidad para actualizar conocimientos sin dejar el trabajo, así como la facilitación del calce entre la oferta y la demanda laboral.
En cuanto a las habilidades más relevantes a acreditar, se mencionan las digitales, las destrezas técnicas de cada rubro, el aprendizaje de idiomas, las habilidades blandas y los conocimientos de gestión.
Los expertos destacan la importancia de las microcredenciales que abordan competencias en áreas como análisis de datos, inteligencia artificial, ciberseguridad y programación para mantener la competitividad en un entorno laboral digitalizado.
Según los reclutadores, las microcredenciales pueden ayudar a reducir brechas en habilidades en sectores como información y comunicaciones, salud y servicios sociales, y educación y formación continua.
En sectores estratégicos como tecnologías de la información, salud y finanzas, la incorporación de microcredenciales representa una oportunidad para responder a las demandas del mercado y reducir las brechas de habilidades.
En resumen, las microcredenciales se perfilan como herramientas relevantes para certificar habilidades específicas, adaptarse a cambios del mercado y fortalecer trayectorias profesionales más ágiles y diversificadas en un contexto de transformación tecnológica y formación continua.