Una de las preguntas clave para la Reserva Federal es quién pagará por el alza de aranceles anunciada por la Casa Blanca. La respuesta es clave para determinar el impacto inflacionario de las tarifas una vez que entren en efecto.
Si bien eso no ocurrirá hasta el 1 de agosto, según el nuevo plazo establecido por Washington, ya hay tarifas vigentes poniendo a las cadenas de suministro bajo presión, por ejemplo: a los productos chinos, los autos, al acero y aluminio.
Tanto la Reserva Federal como el mercado buscarán pistas sobre su impacto en los balances del segundo trimestre, que las empresas estadounidenses publicarán a partir de la próxima semana.
Serán los grandes bancos de Wall Street los que marquen el arranque de la temporada de reportes de resultados, el 15 de julio. Este es un sector que llega a la presentación de balances con sus acciones en máximos, ante las expectativas de recortes de tasas de interés que impulsen el consumo y menores regulaciones en EEUU.
Por su cercanía con el consumidor, en sus divisiones retail, y las empresas e inversionistas en sus divisiones corporativas y de inversiones, las proyecciones de los bancos son siempre analizadas con atencion.
Pero serán las empresas más expuestas al alza de aranceles, retailers, constructoras, manufacturas, las que capturarán la atención de los inversionistas. Algunas preguntas a las que se buscará respuesta: ¿Están las empresas absorviendo el alza de tarifas? ¿Cuánto más pueden hacerlo? ¿Están movilizando su producción a EEUU? ¿Han modificado sus planes de inversión? ¿Proyectan una menor demanda?
Estas son solo algunas de las interrogantes que -de seguro- cruzan las mentes de los inversionistas, sobre todo desde la última arremetida de amenazas arancelarias de Donald Trump
En general, las perspectivas no son muy positivas. Según datos de LSEG, los analistas esperan que las utilidades de las empresas del S&P500 crezcan 5,8% en el segundo trimestre. La cifra representa una fuerte desaceleración respecto al 13,7% del primer trimestre de este año. También se trata de la menor expansión desde finales de 2023.
También se espera un impacto de los aranceles en los balances europeos. Datos de LSEG muestran que el mercado prevé una caída de 0,2% en las utilidades de las principales acciones europeas.
Servicios de Comunicación y Tecnología serían dos sectores que se desacoplarían de esta tendencia, con alzas de 32% y 18% en sus utilidades, respectivamente.
De vuelta a la macro
El que los balances y conferencias con inversionistas se tomen los titulares, no quiere decir que los datos económicos desaparezcan de la agenda. Por el contrario, la próxima semana nos traerá importantes reportes.
Desde Beijing llegarán cifras de crecimiento, el 15 de julio. Al igual que con los balances de las empresas, este será el reporte que capture el impacto de la arremetida arancelaria en el crecimiento de China. Los analistas proyectan que la economía china tuvo una importante desaceleración. Se espera un crecimiento trimestral de apenas 0,4%, en la que sería la menor tasa de expansión desde el segundo trimestre de 2022.
El alza de aranceles de EEUU ha afectado la demanda por los productos chinos, poniendo más presión sobre Beijing para adoptar medidas que impulsen la demanda interna y el sector de servicios. Por ahora, el mercado no espera que el banco central de China recorte tasas de interés cuando se anuncien los tipos a uno y cinco años hacia inicios de la próxima semana (20 de julio).
Pero no será el PBoC, sino la Fed la que capture la atención del mercado. El martes 15 de julio, EEUU reporta su índice de precios al consumidor. Analistas esperan que la inflación registre una nueva alza en junio, para marcar una tasa anual de 2,5% y de 2,9% en su medición subyacente. Aunque el Presidente estadounidense insiste en que “no hay inflación”, el reporte del próximo 15 de julio podría mostrar que -por el contrario- la inflación está volviendo a acelerar.
El dato llegará en medio de la arremetida de la Casa Blanca contra Jerome Powell, presidente de la Fed. La campaña incluye reportes con nombres de sus posibles sucesores, ya en franca competencia -a lo reality The Apprentice-.
El mercado prestará atención a la conferencia que tiene agendada el 16 de julio el presidente de la Fed de Nueva York, y vicepresidente del comité de política monetaria, John Williams. Mientras, los indicadores de ventas de retail y permisos de edificación de nuevas viviendas, a publicarse el 16 y 17 de julio, respectivamente, confirmarían un escenario de desaceleración de la actividad durante junio.
Si los pronósticos se cumplen, la próxima semana tendríamos la confirmación de un escenario que tiende más hacia la estanflación (bajo crecimiento, mayor inflación) que a un boom económico como ha prometido la Casa Blanca. Sin embargo, y esta es la esperanza que mantiene vivo el apetito por el riesgo en el mercado, los balances de las empresas deberían demostrar que la desaceleración y el impacto de los aranceles aún es moderado. Es la fe en la economía estadounidense, en su capacidad de adaptación, en que -al final del dia- todo estará bien.
Vale seguir de cerca…
Inflación
Argentina (lunes 14), Reino Unido (miércoles 16), y la Eurozona (jueves 17) reportan sus tasas de inflación a junio.
Datos de crédito
El Banco Central publica la Encuesta de Crédito Bancario del segundo trimestre. (martes 15).
Actividad
Perú (martes 15) y Colombia (viernes 18) reportan indicados de actividad económica de mayo.
Resultados en agenda
JPMorgan, Blackrock, Citi, Wells Fargo, Bank of New York Mellon y América Móvil (martes 15). Bank of America, Morgan Stanley, Goldman Sachs y J&J (miércoles 16). Netflix, General Electric, TSMC y Pepsi (Jueves 17). American Express ySouthern Copper (Viernes 18).