Max Verstappen dice que tiene bajas expectativas para el Gran Premio de Austria después de que el rendimiento de su coche se fue y se clasificó séptimo.
Red Bull llegó a su carrera en casa con esperanzas de competir cerca del frente, ya que trajo una mejora y tradicionalmente ha ido bien en su circuito local. Después de parecer estar un paso detrás de McLaren durante la práctica pero aún dentro de la distancia de ataque, Verstappen no pudo completar vueltas limpias mientras se quejaba de la falta de agarre en la clasificación y terminó séptimo en la parrilla.
“Creo que ayer no fue bueno en una vuelta, la larga tampoco fue buena y hoy FP3 fue un poco más positivo pero aún así no suficiente,” dijo Verstappen. “Entonces en la clasificación básicamente todo se sintió mal. Cada curva era una lucha; simplemente no tenía el equilibrio. Era subviraje o sobreviraje. Incluso cada vuelta que hice tenía un comportamiento un poco diferente del coche así que eso no es ideal.
“No quiero hablar sobre las mejoras porque creo que no solo las mejoras causaron todo esto. Simplemente de repente realmente retrocedimos, lo cual no es lo que deseas de FP3 a la quali.
“No tocamos el coche…. Solo pequeños cambios que no deberían influir en el equilibrio del coche. Todo eso es manejable pero de repente con las temperaturas más altas de la pista y más viento, simplemente se desmoronó.”
Dado cómo estaba manejando el coche y las regulaciones de parc fermé que restringen los cambios en la configuración, Verstappen cree que le espera una tarde difícil el domingo.
“No se espera mucho. No para luchar en la parte delantera, por supuesto. Las condiciones más calidas tampoco ayudan. Hasta ahora este año no hemos sido más competitivos en la carrera que en la clasificación. Veremos qué podemos hacer mañana.
“No esperaba que fuera tan malo en la clasificación pero creo que nadie lo hizo en el equipo. Así que eso es algo que tenemos que analizar.”
