Lionel Messi ha sido uno de los jugadores más influyentes en el fútbol mundial en las últimas dos décadas. A sus 37 años, continúa desempeñándose a un alto nivel en la Major League Soccer con el Inter Miami. Pero tras la eliminación del equipo de la Copa de Campeones de la Concacaf, han vuelto a surgir preguntas sobre cuánto depende el equipo de él. El veterano centrocampista Sergio Busquets abordó el tema directamente.
Inter Miami se enfrentó a un déficit de 2-0 antes del segundo partido de la semifinal de la Copa de Campeones contra los Vancouver Whitecaps. Los Herons marcaron primero en el minuto 9, avivando brevemente las esperanzas de una remontada. Sin embargo, no pudieron mantener el impulso y finalmente cayeron 3-1 en casa, otra actuación en la que tanto el equipo como Messi lucharon por tener un impacto significativo.
Cuando se le preguntó sobre la dependencia del equipo de Messi, Busquets no se alejó de la realidad. “No hay equipo con Messi en él que no dependa de él. Es el jugador más decisivo del mundo, el mejor jugador, y es obvio que tenemos que depender en gran medida de él, aunque no al 100%”, dijo a los reporteros en la zona mixta.
Busquets agregó que la participación de Messi sigue siendo un indicador clave del éxito del equipo: “Cuanto más esté involucrado en el juego, más lo buscamos y más nos puede ayudar, eso será una buena señal”.
Influencia de Messi en el Inter Miami en 2025
Como señaló Busquets, la influencia de Messi no se limita a los goles. Su capacidad para orquestar el juego desde posiciones más profundas lo convierte en el motor detrás de la ofensiva del Inter Miami. Esa influencia ha sido un tema constante a lo largo de su carrera, ya sea en el Barcelona, el Paris Saint-Germain o con la selección nacional de Argentina.
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En 2025, Messi ha participado en 13 partidos para el Inter Miami, anotando 8 goles y registrando 3 asistencias. Su participación se correlaciona directamente con el éxito del equipo: en los ocho juegos en los que ha marcado o asistido, Inter Miami está invicto (6 victorias, 2 empates). En los cinco partidos en los que no contribuyó a un gol, el récord del equipo baja a 1 victoria, 1 empate y 3 derrotas.
Contra Vancouver, Messi luchó por igualar la fisicalidad de la oposición. A pesar de algunas oportunidades, no logró tener un gran impacto y el ataque de Miami lució desarticulado sin él dirigiendo el juego. Las esperanzas de la Copa de Campeones de los Herons terminaron en frustración, destacando una vez más cuánto dependen de su número 10.
Messi sigue siendo un jugador que puede cambiar el juego, pero cuando no está en su mejor momento, Inter Miami suele quedarse corto. A medida que avanza la temporada, la capacidad del club para tener éxito cuando Messi no está en su mejor momento podría definir hasta dónde llegarán en 2025 con la Copa Mundial de Clubes de la FIFA en el horizonte.